Las juventudes en la construcción de su presente

Hay muchas maneras de ser joven en la sociedad mexicana, derivadas de la desigual distribución del capital económico y educativo, de las redes[1] formales e informales a las que se logra acceder.

Ser joven significa encontrarse en una época de cambios que representa una oportunidad fundamental para la toma de decisiones de vida: dejar atrás la infancia para adquirir nuevas responsabilidades y un papel diferente en la sociedad. Definir por completo a la población joven de México es complejo. La realidad en la que se encuentran es diversa, ya que en ella interactúan diversos componentes demográficos, sociales, económicos, culturales y espaciales[2].

“Las juventudes son el futuro de…” es una carga importante depositada en las juventudes de nuestro país y de cada comunidad urbana y rural que ve en ellas la posibilidad de mejorar el destino de la misma. En el imaginario colectivo eso no tiene un momento preciso y su ambigüedad puede pasar de generación en generación, porque cuando es el momento del cambio, esas juventudes ya son adultas y siguen repitiendo el patrón que presiona a las otras juventudes, depositarias de una posibilidad de cambio que el adulto centrismo dificulta lograr.

Este ideario está en proceso de cambio, al igual que el ejercicio diario del derecho que las y los jóvenes identifican como una posibilidad de accionar dentro de su comunidad en ámbitos que ya se están abriendo su participación.

Ante este panorama que avizora cambios sustanciales y como parte del compromiso adquirido en el apoyo de comunidades rurales forestales, el CCMSS en su incidencia en la península de Yucatán desde el 2017 acompaña procesos con y para las juventudes de la región. Las acciones que se impulsan están enfocadas a fortalecer su participación en procesos que dignifiquen su persona, su ser joven y reivindiquen el poder de la colectividad.

Las acciones con juventudes se han centrado en 18 comunidades del municipio de José María Morelos, Q. Roo [3], con una participación directa de más de 80 mujeres y hombres, que se calcula han influenciado al menos a otras 320 personas más en su comunidad, considerando a la familia y a sus iguales.

Se han trabajado procesos para acercar a esta población que no tiene derechos agrarios al uso y manejo de los recursos naturales de su territorio, como es el caso del acercamiento a las acciones específicas de los ejidos en procesos de aprovechamiento forestal, esto a través de un programa denominado Plataforma Forestal (2017-2018).

Ante el interés de la población joven de incursionar en la actividad apícola, misma que representa un complemento a los medios de vida de la región, se impulsó la Iniciativa Apícola Regional (IAR) que se convirtió en un espacio de participación de mujeres y hombres jóvenes interesados en aprender y mejorar sus conocimientos sobre la crianza de abejas Apis mellifera

El establecimiento de apiarios y su consolidación se trabajó del 2018 al 2022. A partir del conocimiento y la experiencia en la IAR, se acompaña el establecimiento de emprendimientos de diversificación de la cadena de valor asociada a la apicultura. 

La EIPA

Estas acciones se realizan bajo el eje de autonomía económica en el marco de la Estrategia de participación activa para mujeres y juventudes (EIPA) [4].

Dentro de este planeamiento, también a través del eje de liderazgos comunitarios se impulsó la construcción de conocimientos y experiencias para fortalecer su accionar dentro de las comunidades donde viven, implementado de manera complementaria a los procesos productivos ya mencionados.

En el marco de la EIPA, durante el 2022 un grupo de juventudes de siete comunidades del José María Morelos, Q. Roo, iniciaron un proceso de reconocimiento de su identidad y de fortalecimiento de sus liderazgos comunitarios a través de mirarse como sujetos de derecho, bajo la perspectiva de género e intercultural.

El reconocer sus saberes, compartirlos y construir otros nuevos sobre si mismos y sobre las otras juventudes es parte del propósito del espacio acompañado por el CCMSS.  

Las juventudes se prepararon para la implementación de un diagnóstico participativo para/con sus iguales en cada comunidad.

Durante el proceso formativo, basado en la praxis de la educación popular, las mujeres y hombres asistentes socializaron metodologías y herramientas participativas y fueron preparándose para la implementación de diagnósticos con/para las juventudes de sus comunidades, transversalizando el enfoque de derechos, interculturalidad y perspectiva de género. 

Actualmente se encuentran ejecutando la agenda que prepararon para la implementación de dichos autodiagnósticos por comunidad, además del consenso que se pretende tener por cada diagnóstico, se elaboraran materiales de difusión de los resultados para compartirlos entre sus iguales y la población en general. Cada grupo determinará el o los medios adecuados a la dinámica de cada comunidad.

Esperamos pronto compartir el resultado del gran esfuerzo que las juventudes están realizando con dedicación y entusiasmo.

El proceso


Referencias:

[1] Expresa García Canclini para el caso de México y Feixa en un análisis más global, los jóvenes gestionan de una manera particular sus emociones y para hacer frente a esta realidad líquida construyen redes de conocimiento-aprendizaje, desarrollan proyectos culturales al margen de lo gubernamental, son solidarios entre ellos, usan las TIC como TAC (Tecnologías del Aprendizaje y del Conocimiento), y tienen una visión global del mundo con expresión local. Las juventudes en México, situación actual y perspectivas. Fundación SM.nov.2018

[2] Las juventudes en México, situación actual y perspectivas. Fundación SM.nov.2018

[3] El naranjal, Candelaria, Kankabchen, La esperanza, Rancho viejo, Insurgentes, Cafetal Grande, Corral, Puerto Arturo, Adolfo López Mateos, Mariano Matamoros, Sabán, Sacalaca, Xcabil, San Felipe Oriente, San Antonio Tuk, Dziuche y José María Morelos.

[4] La EIPA tiene como propósito generar condiciones para que mujeres y juventudes participen en procesos autogestivos que dignifiquen su persona y sus formas de vida colectivas.